Voluntad de hierro


Un judío, que prometió a su hija un viaje en avioneta, como regalo de cumpleaños, está negociando con un piloto acrobático:

  • Cuánto me cobra por dar un paseo de una hora?.
  • Quinientos pesos
  • ¡Uf! Eso es mucho dinero, ¿Y si solo es media hora?
  • Por media hora, doscientos cincuenta
  • ¿Doscientos cincuenta?, ¿no tiene nada más barato?
  • Pues mire, podemos hacer un trato. Si usted se sube a la avioneta y es capaz de estar completamente callado durante todo el vuelo, no le cobro ni un peso.
  • ¡Hecho!

Suben los tres y el piloto empieza a hacer piruetas, rizos, caídas en picado, el avión boca arriba, boca abajo... y el judío mudo.

Por fin se cansa el piloto y aterriza.


  • ¡Oiga!, me tiene usted asombrado. Mire que hice cosas peligrosas con la avioneta y usted no pronunció ni una palabra.
  • Si quiere que le diga la verdad... estuve a punto de gritar cuando...

¡Se cayó mi hija...!

QuinHumor en tu eMail

Ingresa tu dirección de correo electrónico y recibirás nuestras publicaciones en tu casilla:

Recuerda confirmar tu registro en el mensaje que llegará a tu dirección.
Es un servicio de FeedBurner