Cuando llegó el equipo decidió probarlo en él mismo,aprovechando que su esposa estaba de viaje, de modo que insertó su miembro en la succionadora y encendió el equipo... Y todo sucedió automáticamente.
Se dio cuenta que el equipo le brindaba más placer que su esposa, éxtasis total... quedó exhausto, cuando la diversión terminó, se percató de que no podía retirar su miembro del equipo. Intentó de todas formas, pero nada; y empezó a ponerse nervioso.
Se estiró hasta alcanzar los papeles de la ordeñadora, que habían quedado sobre la mesa. Leyó el manual sin conseguir ninguna información que lo ayudara, movió todos los botones, apagó el equipo y finalmente lo desenchufó, sin ningún resultado, así que decidió llamar a la línea de Servicio de la compañía 1-800-ORDEÑO
- Hola, buenos días señorita, yo adquirí una ordeñadora automática en su compañía, trabaja fenomenal, pero, ¿Como puedo hacer para remover los succionadores de los pezones de la vaca? Están como atascados.
- ¡Ahhh! No se preocupe señor -respondió la telefonista- la máquina los liberará automáticamente cuando recolecte 5 litros de leche.